FONDO MONETARIO
INTERNACIONAL Y MUJER
Tengo ante
mi el documento del Fondo Monetario Internacional que lleva por título Las mujeres, el trabajo y la economia:
beneficios macroeconómicos de la equidad de género cuyos autores son Katrin
Elborgh-Woytek, Monique Newiak, Kalpana Kochhar, Stefania Fabrizio, Kangni
Kpodar, Philippe Wingender, Benedict
Clements y Gerd Schwartz. Publicado por
el FMI SDN/13/1 de semptiembre de 201
como análisis del personal técnico del FM
Allí se
enuncian a modo de conclusiones lo que
justificaria el esfuerzo de las
políticas gubernamentales para la
incorporación de las mujeres al mundo laboral:
1. Cuando las
mujeres pueden desarrollar plenamente su potencial en el mercado de trabajo,
los beneficios macroeconómicos son significatives.
2. En las economías que están envejeciendo con
rapidez, una mayor PFFL puede estimular el crecimiento al mitigar el impacto de
la reducción de la mano de obra.
3. Mejores oportunidades para que las mujeres obtengan
ingresos y los controlen podrían contribuir a un desarrollo económico más
amplio en las economías en desarrollo.
4. La igualdad de acceso a los insumos incrementaría
la productividad de las empresas cuyas propietarias son mujeres.
5. El empleo de las mujeres en condiciones de igualdad
permitiría a las empresas aprovechar mejor la reserva de talento disponible, lo
cual redundaría en un mayor crecimiento potencial ( de la empresa).
Continua el informe mostrando e insistiendo una
vez más en que numerosas estadísticas a
nivel internacional muestran diferencias
respecto de los hombres en cuanto a la incorporación de la mujer al
mundo laboral, principalment asalariado.
Los cinco principios,
puesto que nada prueban, enumerados en este estudio son verdades de perogrullo que no necesitan de los
sesudos estudios (con cargo a los
contribuyentes de todo el mundo) realizados por funcionarias y funcionarios del
FMI para probar lo que es
evidente, dentro de la lògica del productivismo, que la incorporación de la mujer al
mundo laboral puede suponer un
incremento de la productividad en general y de la empresa en particular, al contar con
un mayor número de mano de obra y “ una mayor reserva de talento disponible”
para la producción.
¿Queda alguna duda sobre la finalidad de las
cacareadas políticas de género promovidas desde organismes Internacionales
tales como el FMI, el BM o la ONU?
¿Alguna duda sobre el tipo de “emancipación econòmica”
de la mujer que se está promoviendo desde altes instancias?
¿Alguna duda sobre las “políticas de igualdad ” que se
dictan a los gobiernos desde dichos organismos?
¿Y sobre la intención de
“liberación de la mujer” de la que
nos hablan?
¿Alguna referencia a la
búsqueda de lo fundamentalmente humano para la mujer?
El modelo productivista, basado
en el esclavismo asalariado, ha sido el destructor del varón en cuanto ser manipulado, masificado e incapacitado para la autogestión productiva y
la libertad política. Y en este sentido ha sido igualmente destructor de la
mujer, no sólo por haberla sometido al
varón, sino a un varón sin criterio propio, menoscabado en su humanidad, sólo
apto para el trabajo como asalariado y para la guerra como soldado.
Ahora interesa que la mujer “se
libere”, se “emancipe”, se “iguale” y
se empodere”. Es decir, se incorpore a la fábrica y al ejército al 100%,
tal como se hizo con el varón en los pasados siglos.
¿Se espera así combatir el “machismo”
o se está añadiendo el “hembrismo” a la conflictiva
convivencia del ser humano dentro del sistema productivo capitalista?
¿Por qué no hablamos de la
verdadera liberación del ser humano basada en la autogestión productiva y la
libertad política?
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